Rousseff dice que condena a Lula consumaría "golpe de Estado parlamentario"
El Parlamento brasileño inició en 2016 el proceso de destitución de la expresidenta por "manipulación de cuentas"
La expresidenta brasileña Dilma Rousseff avisa de que una condena a su antecesor, Luiz Inácio Lula da Silva, quien mañana afrontará un decisivo juicio por corrupción, consumaría "un golpe de Estado parlamentario" en Brasil.
"Si Lula es condenado es porque quieren ir hasta el fondo del golpe de Estado, la primera fase fue mi destitución (en 2016). Todo esto ha sido por nuestra opción de una agenda contra lo neoliberal: por ir contra cambiar la ley del trabajo, de las pensiones, la venta de Petrobras, la privatización de los bancos públicos", dijo Rousseff en una entrevista al canal France 24 divulgada hoy.
La antigua mandataria (2011-2016) atacó al Parlamento brasileño que inició en 2016 su proceso de destitución por "manipulación de cuentas" y defendió a su colega de partido Lula da Silva, al que consideró "claramente inocente".
Un tribunal de segunda instancia en Porto Alegre juzgará mañana el recurso interpuesto por el carismático expresidente contra la pena por corrupción pasiva y lavado de dinero impuesta por el juez Sergio Moro en una causa relacionada con la trama destapada en la petrolera estatal Petrobras.
De ratificarse la sentencia, la eventual candidatura de Lula a los comicios presidenciales del próximo octubre podría ser anulada, aunque la decisión final sería tomada por la Justicia electoral.
Rousseff aseguró que hay otros políticos "claramente culpables" y apuntó a su antiguo vicepresidente Michel Temer, que le sustituyó en la jefatura del Estado.
"Hay registros grabados contra él, imágenes de vídeo que muestran una maleta con dinero. Ha estado acusado incluso por el fiscal general, pero nada le ha sucedido porque la misma mayoría que me echó le protege", indicó.
Preguntada por el ascenso de Jair Bolsonaro, defensor de la dictadura militar brasileña al que las encuestas sitúan detrás de Lula da Silva, y la posibilidad de que se produzca golpe militar en el país, Rousseff zanjó: "Estoy segura que las Fuerzas Armadas son democráticas".
La expresidenta lamentó "la pérdida de credibilidad internacional" de su país desde que la destituyesen.
Rousseff descartó ocupar un puesto legislativo o ejecutivo, pues hay otras maneras de ejercer política.
"Estoy en ella desde los 16 años y a los 21 me arrestaron" por la vinculación contra un grupo opositor a la dictadura, recordó.
EFE